DÍA 7. ARE YOU READY FOR THE CHALLENGE?

 El día de hoy fue muy especial, ¡pues era el cumpleaños de una de nosotras!

Desde horas muy tempranas empezamos a preparar una pequeña sorpresa para Elena. Decoramos el salón con globos y guirnaldas y además, compramos una tarta. 

Cuando se despertó, le dijimos que se vistiera para ir a desayunar, pero lo que ella no sabía era que le esperaba una gran sorpresa. Le tapamos los ojos y la llevamos hasta donde nos encontrábamos los demás compañeros. ¡No se lo esperaba para nada! Le encantó nuestra sorpresa.

Luego jugamos al pasapalabra en inglés con nuestros amigos de Albacete, con palabras relacionadas con nuestro proyecto en Irlanda. Fue un rato súper divertido. 

Seguidamente, fuimos rumbo a una sala para preparar las actividades para los niños de Child Vision que próximamente conoceremos. Seguro que les encantarán las dinámicas que hemos preparado.

El plan estrella de hoy fue ir a Dundalk, donde conocimos un poco su historia y realizamos, en grupos, diferentes retos por toda la ciudad que iban desde sacarse fotos con un pelirrojo (aquí hay muchos) hasta pedirles que cantaran cumpleaños feliz a la cumpleañera. 

Nos lo pasamos súper bien, nunca olvidaremos esos momentos tan divertidos. Aprovechamos para interactuar con los locales y practicar nuestro inglés, of course!

Cuando llegamos de vuelta al hostel estábamos hambrientos, así que nada más llegar comimos pizzas, que estaban buenísimas y las disfrutamos como nunca.

Durante el postre, le hicimos una broma a Elena, donde nuestros profes Luis y Chabela se compincharon con nosotros para ir llamándonos porque supuestamente estaban muy enfadados con nosotros. La pobre Elena se lo creyó todo y estaba muy preocupada pero lo que no sabía era que detrás de todo esto, nos escapábamos para firmarle una camiseta super chula para que se la llevara de recuerdo. 

Cuando aparecimos con la camiseta, una tarta con velas y los globos, se quedó muy impresionada y muy agradecida, aunque debemos de decir que seguro que fue un alivio, porque ella pensaba que nos iban a castigar a todos.

Finalmente, cogimos las bicis para practicar un poco y, aunque algunos hacia tiempo que no las cogían, a todos nos salió súper bien.

Fuimos por un sendero a oscuras, pero con las luces de las bicis. Vivimos una experiencia un poco tenebrosa  pero muy emocionante, ¡mereció la pena!

Terminamos el día cenando arroz con curry, un poco picante pero... ¡¡buenísimo!!